La Asamblea General de las Naciones Unidas proclama el 16 de septiembre Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono, con el fin de proteger y salvar la capa de ozono que está siendo destruida por el calentamiento global.
En 1994 la Asamblea General de las Naciones Unidas, en la Resolución 49/114, "proclama el 16 de septiembre Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono, en conmemoración del día en que en 2003 se firmó el Protocolo de Montreal relativo a las sustancias que agotan la capa de ozono, que se celebrará a partir de 1995".
Cooperación global para proteger la vida en la tierra
La capa de ozono es una franja frágil de gas que protege la Tierra de los efectos nocivos de los rayos solares, contribuyendo así a preservar la vida en el planeta.
Este año se cumplen 35 años de la adopción del Protocolo de Montreal, uno de los acuerdos medioambientales de mayor éxito, que puso remedio a una de las mayores amenazas a las que se había enfrentado la humanidad: el agotamiento de la capa de ozono.
La utilización durante años de ciertos productos químicos había dañado la capa, poniendo en peligro la existencia del ser humano y la del resto de seres vivos del planeta. Un esfuerzo internacional conjunto permitió la eliminación y reducción del uso de sustancias que agotaban la capa de ozono, ayudando no solo a protegerla para la generación actual y las venideras, sino también a mejorar los resultados de las iniciativas dirigidas a afrontar al cambio climático. Esos esfuerzos han protegido asímismo la salud humana y los ecosistemas reduciendo la radiación ultravioleta del sol que llega a la Tierra.
Con este acuerdo, se demostró que el multilateralismo y la cooperación mundial efectiva funcionan. Ahora, la capa de ozono se recupera poco a poco, permitiendo que siga protegiendo a la humanidad de la radiación ultravioleta del sol.
Organización de las Naciones Unidas